viernes, 29 de mayo de 2009

Monos aulladores en Balzar

A veces tengo la tendencia a pensar demasiado en bosques naturales prístinos. Lugares inaccesibles, llenos de biodiversidad, naturales a mas no poder. Casi intocados por el ser humano. Por eso me gustan tanto las áreas protegidas, por eso me molestan tanto las amenazas.

Pero el otro día me di un baño de humildad. Fui a conocer una hacienda donde se está realizando un experimento de silvicultura. Es decir, de mezclar pastos con cobertura arbórea y mejorar la productivdad de la ganadería y beneficiar a la naturaleza. Yo paso un poco del tema, pero en cambio, me interesa que si en esas fincas hay remanentes de bosques, éstos permanezcan en el tiempo. Para mi, esto es tirarme al otro extremo. Empezar a jugar las grandes ligas, trabajar con propietarios privados, con sectores productivos. Dejar las razones románticas y buscar razones económicas. Será posible?

No se, pero de eso se trata. El baño de humildad vino porque no pensé encontrar nada que valga la pena. Revisé algo de literatura, revisé los mapas. Todo parecía indicar que no había chance de encontrar nada.

Y así fue al principio. Recorrí las carreteras del gran Guayas, bien mantenidas. A los costados, arrozales. Y luego, al llegar cerca de Balzar, apareció algo de teca. Al entrar a la finca nos encontramos con unos tecales grandes. En teoría 200 hectareas. Pero de repente, el paisaje cambió. Nos encontramos en un bosque natural. Básicamente mucho guasmo. Y pensé que sería un bosque pequeño, pero no, no era tan pequeño. Nos bajamos a caminar y encontramos árboles de buen diámetro. Fernán Sánchez, Samán, Guachapelí. También algo de guarumos, los guasmos. En la ramas, bromelias y orquídeas. Aves típica de bosques intervendios. Garrapateros, horneros y palomas.

De repente, entre las ramas de un samán, algo se movía. Monos aulladores, una tropa de 6 a 8 individuos. Estaban muy altos y a contraluz, pero igual les pude tomar unas fotos. No está mal para un bosque se seguramente está aislado. La persona que nos acompañaba nos dijo que en el bosque había venados, tigrillos, guantas, guatusas. Y en los ríos, bocachicos y otros peces.

La pregunta del millón es, vale la pena conservar esto? Y la respuesta es si. Es un lugar aislado que probablemente no puedan mantener poblaciones de jaguares, pero si una diversidad menor que es mejor que nada. Es lo poco que queda por la zona así que tiene más valor todavía.

El desafío es trabajar con el propietario y valorar la práctica de conservar el bosque. Los fines altruistas sirven pero son poco seguros. Hay que buscar alguna forma de beneficiar al propietario a cambio de mantener el bosque y recuperar ciertas áreas.

Por lo pronto, ahi estuvo la sorpresa. Y la lección. No solo de áreas protegidas vivirá el conservacionista.

lunes, 25 de mayo de 2009

Ecuador Diverso...por el dia de la biodiversidad atrasado

Montañas, ríos, mar, quebradas, riachuelos, lagunas, pantanos, glaciares, selvas, páramos, bosques, acantilados, volcanes, nevados, lagos, arenales, desiertos, matorrales, sabanas.

Papaya, mango, araza, aguacate, naranja, mandarina, lima, banano, orito, sandia, melón, babaco, badea, coco, piña, granadilla, ciruela, tamarindo, pera, manzana, uvas, limón, mamey, zapote.

Papa, melloco, lechuga, tomate, pimiento, cebolla, perejil, maíz, arroz, cilantro, ají, café, cacao, oca, zapallo, brocolí.

Sahino, tucán, piqueros, corvina, robalo, chame, papagayo, loro, perico, perezoso, boa, jambato, sapo, rana de cristal, equis, anaconda, salamanquesa, lagartija, iguana, jaguar, puma, tigrillo, mono, oso, tapir, murciélago, pelícano, atún, tiburón, manta raya, fragata, colibrí.

Fritada, hornado, chugchucara, caldo de pata, caldo de maguera, sopa de bolas, sancocho, seco de chivo, arroz con menestra carne y patacones, llapingacho, mote pillo, mote sucio, ayampaco, cecina, guatita, cebiche, corviche, cazuela, tortillas de maíz, biscochos, greñoso, tigrillo, yaguarlocro, locro de papas, helado de paila, higos con queso, encocado.

Guayacan, cedro, pumamaqui, bálsamo, Fernán Sanchez, ceibo, puya, orquídea, bromelia, helecho, membrillo, pechiche, guasmo, jigua, matapalo, ciruelo, nogal, aliso, sauce llorón, almendro, acacia, manglar, algarrobo.

Playas rocosas, playas arenosas, islas, islotes, plataforma continental, coral, bajos, olas, viento, marea

Huaorani, chachis, montubios, quichuas, siona, secoyas, cofanes, shuar, achuar, záparas, afros, awa, mestizos, extranjeros, hombres, mujeres, niños, ancianos.

Vaca, chivo, perro, gato, cerdo, cuy, conejo, cabra, gallina, pavo

Temblor, terremoto, El Niño, inundación, deslizamiento, erupción, avalancha, sequía, helada, vientos, polvareda.

Deforestación, erosión, contaminación, cacería, especies invasoras, monocultivos, tráfico de especies, tala, derroche de recursos, basura, metales pesados, plaguicidas, ruido, aguas servidas

Rosas, banano, camarón, café, cacao, palma africana, petróleo, frutas tropicales, madera, cobre, oro, plata.

Azul, amarillo, rojo, violeta, verde, celeste, morado, gris, negro, blanco, marrón, anaranjado, café.

Canicas, trompo, indor, ecuavolei, macateta, rondas, cometas, cuerda, rayuela

miércoles, 20 de mayo de 2009

Puna

Voy a pecar. Pero bueno, nunca he dicho que esto sea periodismo. Quisiera que lo sea pero no tengo los medios, solo mi cabeza y el tiempo que le robo al trabajo. No puedo ir a las fuentes ni visitar los sitios....

Entonces con que cara opina?

Pues nada, con el derecho de un ciudadano comun. Nadie tiene porque leerme o por que creerme.

Toda esta lata para empezar a hablar de un tema importante. La explotación del gas en Puná. Otra vez enfrentados a la dicotomía de desarrollo y conservación. El desarrollo representado por la posible explotación de un recursos natural. La conservación representada por uno de los ecosistemas menos atendidos y más importantes del país. Los ecosistemas de manglar y bosque seco de la isla Puna.

Para variar, llegamos tarde. La discusión en este momento es un poco inútil. Hay un poder muy grande del gobierno empeñado en la explotación del gas. Y detrás los intereses económicos de diferentes actores. Ojo no digo que esos intereses sean malos, solo digo que están ahí. Además, está la gente con necesidades en Puná. Un rincón olvidado y desconocido. Tan cerca de Guayaquil y tan lejos.

Es que nos dormimos, es que no hay nadie vigilando estos temas ni estos espacios. Donde estabamos me pregunto yo? No es que el hecho de la explotación estaba camuflado. Algo sabíamos pero no actuamos a tiempo. También hay que manifestar que no ha habido suficiente información de parte del gobierno. Una obra de esta magnitud e importancia debería conocerse más, ser más transparente. Pero para variar, cuando el gobierno piensa que puede haber contradicción por el tema ambiental, mantiene el perfil bajo lo más posible, para que los actores que ya son débiles per se, tengan poco espacio y más debilidad. No es una estrategia nueva, es una de las herramientas de la larga noche neoliberal que no se ha elliminado.

Supuestamente ya está declarado el proyecto como de prioridad nacional. Entonces se supone que todos debemos sentarnos y aplaudir. Pero habemos estúpidos que no entendemos eso, que nos cuesta bajar la cabeza y hacer reverencia.

No creo que sea este el espacio para hacer una pleitesía de lo que implica para la biodiversidad del Ecuador el golfo de Guayaquil y la isla Puná específicamente. Lo único que quisiera decir es que varios estudios, incluso aquellos avalados por el Ministerio del Ambiente y por SENPLADES identifican a la zona como una prioridad de conservación. Entonces, por que, esas decisiones y prioridades son de segunda categoría frente al Ministerio de Minas y Petróleo? Bueno, el punto es que el lugar es importante y único. No hay un otro lugar en el mundo como Puná. Y no estoy hablando solo de plantas y animales, sino de una ocupación ancestral de la isla.

No soy fatalista, no creo que todo se vaya a acabar. Pero si pienso que el ambiente se va a afectar y no he visto los estudios de línea base que en base a investigaciones serias y profundas indiquen la importancia del lugar y las acciones que deben implementarse para proteger la biodiversidad.

Hace un par de meses se acercó a mi un consultor que estaba haciendo algún estudio. Yo le dí información referencial porque no tengo información específica. Pero estoy casi seguro que no había mayor intención de hacer un verdadero inventario de flora y fauna. Estudios sobre remanencia de ecosistemas y sobre fragmentación. Ojalá me equivoque. La pregunta es donde están esos estudios. Me sorprende el tiempo porque si ese señor me contacto hace dos meses y ahora ya se va a explotar, no se en que tiempo se pudieron hacer estudios serios.

Puna. Por lo menos el tema va a poner a la isla en la palestra. Por lo menos nos podremos acercar a la realidad social de la isla. Ojalá, a más de las migajas sociales con que van a compensar a los pobladores, se les ofrezca verdaderes oportunidades de desarrollo. Ojalá se tomen las medidas necesarias para conservar el ambiente y los recursos arqueológicos. Ojalá se respeten las normas.

Donde estan el Municipio? el Consejo Provincial? Hay que defender a Guayaquil y al Guayas. Puna es Guayaquil, Puná es Guayas. No nos ahuevemos......

Donde estamos las organizaciones de conservación, donde estoy yo?

No puedo dejar de ser autocrítico. No se trata de amarrarse al manglar, pero si de discutir, de exponer los criterios. La sociedad civil puede estar de acuerdo con este gobierno pero también puede estar en contra de las cosas que se hacen mal.

Discutamos el modelo extractivista, discutamos la conservación del Golfo, discutamos la verdad sobre los estudios de impacto ambiental, sobre los procesos de participación social, discutamos el papel de los gobiernos locales.

Insisto, donde estaba yo???? Maldicion

sábado, 16 de mayo de 2009

Turismo y Conservación

El turismo puede ser una estrategia de conservación y una oportunidad de ingresos para las poblaciones aledañas a un área protegida. Pero el turismo también puede ser una amenaza si no se lo maneja de manera adecuada.

El turismo es una estrategia de conservación cuando a través del mismo las poblaciones locales o los propietarios de espacios naturales los conservan para brindar el servicio turístico. Muchas veces dicho cuidado implica una inversión importante de recursos económicos. En ese sentido, la naturaleza puede ser el atractivo por si mismo o el escenario donde ser realizan diferentes actividades de turismo rural, de aventura, agrícola u otro. También, en ciertos casos, el turismo puede ser una fuente de ingresos generando algunos recursos para el manejo del área protegida. El problema es que por el esquema institucional en el Ecuador, dichos ingresos no regresan directamente al área protegida sino que van a la cuenta única.

El turismo es una oportunidad de ingresos para las poblaciones locales pues genera empleos locales. También, en ciertos lugares, donde la gente se organiza y tiene acceso a financiamiento, pueden ser empresarios y recibir las ganancias más allá de un sueldo. Igual que cualquier negocio, el turismo es una actividad complicada que requiere conocimiento y mucho esfuerzo. Pero si se dan las condiciones puede rendir beneficios.

En cambio el turismo puede ser una amenaza cuando el número de visitantes es mayor al que pueden soportar los ecosistemas, o cuando para atender a los turistas se demandan recursos adicionales. Y aunque no tiene una relación directa con el ambiente, el turismo puede causar conflictos sociales e inequidades.

Por todo esto, es importante tratar de que el turismo no ocurra de manera espontánea. El turismo debe planificarse para maximizar los potenciales beneficios a las poblaciones humanas y a la conservación de la biodiversidad y para mitigar sus impactos negativos. Sucede muchas veces, que ante la falta de otras alternativas, muchas poblaciones ven en el turismo una oportunidad. Y puede ser una oportunidad pero no es solo cuestión de tener los atractivos. Es importante desarrollar productos y servicios, contar con infraestructura adecuada y más que nada, realizar procesos de mercadeo importante. El turismo es una actividad especializada que requiere profesionales en diferentes ámbitos.

Uno de los problemas es que el turismo se vuelve un tema dominante y opaca la verdadera misión de las áreas protegidas que es la conservación de la biodiversidad. El turismo es una estrategia de conservación, pero no la única actividad relacionada.

Un caso de análisis puede ser el Parque Nacional Machalilla. Esta área creada hace 30 años posee una biodiversidad única, representativa de los bosques secos. Además, es un área con un gran acervo cultural y una ocupación continua comprobada por más de 8000 años. Muchos de estos recursos naturales y culturales son atractivos turísticos y de hecho reciben visita. En un estudio se registra que desde el 2005 el área recibe alrededor de 28.000 visitantes al año, de los cuáles, el 60% son extranjeros. Esta visitación ha generado USD 170.000 al año.

Este nivel de visitación está dando al área un reconocimiento como destino turístico nacional e internacional. Los principales atractivos son la observación de ballenas, caminatas por senderos naturales, museos arqueológicos y observación de vida silvestre. El turismo ha generado un interés de la población local en la conservación del área como un medio alternativo de sustento. Además, se han generado ingresos para personas locales, aunque de todas maneras las mayores utilidades se reciben fuera del área. Si bien podría ser un poco aventurado decir que el turismo es una amenaza, existen elementos que pueden considerarse alertas sobre este tema. Se han evidenciado afectaciones al mundo submarino por los anclajes de los barcos, los turistas alimentan a los animales silvestres. Pero quizás lo más importante es que el manejo del parque está limitado por los recursos humanos de que dispone y más del 80% de su esfuerzo está concentrado en el manejo del turismo, dejando de lado, temas de gran importancia como el control del manejo de los recursos naturales, la conservación y manejo de los recursos arqueológicos, entre otros.

Es importante considerar el turismo como una estrategia de conservación, pero entender también sus implicaciones positivas y negativas. Como decíamos al principio. Lo importante es planificar y no dejar que ocurra de manera espontánea.