En el aspecto puramente biológico, la muerte es parte de la vida. Es un hecho que nada se crea o se destruye, todo se transforma. Y la muerte, libera los nutrientes y los elementos que estaban atrapados en un organismo. Se liberan esos elementos y de alguna forma vuelven a la tierra o al aire para seguir los ciclos inmutables que dan vida al planeta....un amigo solia decir que cuando nos tocamos el brazo estamos tocando alguna parte de algún dinosaurio. Lo decia en el sentido que los elementos que hoy constituyen nuestro cuerpo son los mismos que los que constituyeron a los dinosaurios, así que por una feliz coincidencia pueden ser los mismos.
La muerte es parte del ciclo, casi una necesidad de la vida. Es la poesía de la vida. Entregamos nuestra vida para que la tierra pueda seguir funcionando.
Pero claro, desde el punto de vista humano, la muerte no es tan poética. Es dolor, es sufrimiento, es un antes y un despúes. Existe una fuerte tendencia de los seres humanos para tratar de alargar la vida. A través de la medicina y de múltiples avances en los temas de salud pública, hemos aumentado la expectativa de vida. Cada vez, menos niños mueren. Cada vez logramos llegar más lejos, incluso con calidad de vida.
Tendrá eso un impacto en los ciclos de vida? No muchos la verdad porque en términos globales, unos años más o menos no representan nada para todo el planeta.
La inmortalidad existe en la naturaleza, pero es otra forma de inmortalidad....
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